¿Y ahora?

El gobierno

Una reelección enmascarada, más allá del cambio de nombre y género, se burla de las promesas de mayor institucionalidad con una presidente electa que ni siquiera anunció su propio gabinete, con los mismos personajes cuestionados, y sumando alguno que otro que no viene precisamente de las mejores prácticas políticas.

La Opción.

La Coalición Cívica se consolidó como la segunda fuerza nacional detrás del aparato oficial, logrando la fórmula Carrió-Giustiniani, un 23,95% (el doble de lo pronosticado por las encuestas un tiempo antes), ganando en Capital Federal con Patricia Bullrich como diputada y obteniendo dos senadores, y excelentes resultados en grandes centros urbanos, y Margarita Stolbizer, una candidata muy capaz, que no apela a las recetas fáciles en su discurso, segunda con un meritorio 25% en la Provincia de Buenos Aires, detrás de alguien con la popularidad de Scioli.

Este resultado es una gran victoria para Unión Por Todos, el ARI, y los justicialistas, demócratas cristianos, socialistas e independientes, incluso apartidarios que integran la Coalición Cívica. Salvo algunos pocos dirigentes del ARI como Macaluse que esperó ser reelecto en la lista de la Coalición, como Raimundi que se viene despidiendo hace rato, y comm María América González que ya en junio fue candidata para otro partido, no significa nada su despedida actual porque ya hace rato se estaban yendo.

Como diría Jorge Guinzburg (a quien no involucro en mi opinión): Los amigos se conocen en las buenas. En mis palabras: Hay gente que te reconforta y te compadece cuando estás mal pero no soporta verte bien. O sea que no tienen problema en acompañarte en el fracaso pero si te va un poco mejor, y especialmente si estás en un espacio que crece y donde no son unos pocos dirigentes los que se destacan sino un esfuerzo colectivo, les preocupa perder su protagonismo. No es ideológico el reparo, porque si así fuera, ya se hubieran ido antes. Quizás esperaron un mal resultado para acercarse, compasivos con su perdón pero exigiendo que se vayan los "piantavotos".

Pero los supuestos "piantavotos" ganaron. La construcción de la Coalición se consolida. Y se quedaron sin argumentos. Esos 8 dirigentes del ARI decidieron alejarse por sí solos. Ya lo hicieron antes al no apoyar en ninguna de las elecciones, pero estiraron su despedida hasta ver el resultado electoral. Pero hay muchos más militantes y dirigentes del ARI, que sí trabajaron para Carrió Presidente, junto a otros partidos.

Ahora no voy a seguir hablando de problemas internos y menos del ARI que no integro, aunque tuve que mencionarlo porque esta situación tiene intención de afectar a la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió.

Ahora hay que trabajar en la Cámara de Diputados, en el Senado, en todos los ámbitos del país donde tenemos representación, para luchar por los principios de la Coalición, Etica, República y Distribución del Ingreso.
También hay que consolidar la Coalición Cívica con la participación de los que nos apoyaron.
Para ser la Opción.